No lo puedo permitir

La naturaleza es una de las cosas que más echo de menos. Nadar en el mar, bucear, hacer senderismo…. son cosas que me encantaba hacer y que ya nunca más podré. Con eso tengo que aprender a vivir, pero al fin y al cabo son actividades que sí practiqué, y mucho, así que me queda el recuerdo y el orgullo. Lo malo son las que, por una u otra razón, nunca llegué a realizar. Esas sí me dan miedo.

Miedo por no haber sido valiente, miedo por darme cuenta ahora, de que ya es demasiado tarde, miedo por lo que pudo haber sido y no fue. Cosas como tirarme en paracaídas, ala delta, puenting… siempre lo deseé pero nunca di el paso porque no se me presentó la ocasión y ahora maldigo por ello. Me asusta darme cuenta de que en la vida hay muchas más cosas por hacer de las que hice y que esas cosas ya se fueron, se me escaparon entre los dedos y ese tiempo perdido no volverá jamás.

Es como si me doliese el futuro, como si me sintiese menos vivo y más marchito, más roto y más frágil.

Es posible que ahora mismo también haya cosas que no hago y que dentro de un tiempo me arrepienta profundamente de no haber hecho. Uno nunca sabe. Lo que sí sé, es que es horrible la sensación de haber desaprovechado una ocasión. Un amigo mío, en un alarde de romanticismo y poesía suele decir «polvo que no te echas, polvo que no recuperas». Y se queda tan ancho. Pero más allá del contenido, la gran verdad es que mi amigo tiene toda la razón. Porque, digo yo, que si no se te presenta una ocasión, pues nada, la generas y se acabó. De eso sí se, de generar ocasiones donde no las había, crear oportunidades de la nada, donde solo había vacío.

Las imágenes de hoy evocan, en cierto modo, esa naturaleza que se me escapó. Tengo suerte porque viví profundamente, pero basta una mirada fugaz al pasado para sentir dolor, un dolor agudo, frío e injusto pero necesario para no olvidar. Dado que mi futuro se presenta casi inexistente, lo peor que me podría pasar ahora sería perder también el pasado. Eso no lo puedo permitir de ninguna de las maneras porque el presente es tan fugaz que, antes de darnos cuenta, ya se ha ido para siempre.

14 comentarios en “No lo puedo permitir

  1. Ay Aceituno… cuánto nos haces pensar!! si bien tienes razón en todo, siempre creemos que lo hacemos todo, y siempre habrá algo que nos falte por hacer, acciones que deseamos con el alma sin embargo nos aterra el miedo, tantos límites que en algún momento nos ponemos. Más razón tienes aún que los viajes, las salidas el contacto con la naturaleza sin duda nos dejan los recuerdos más placenteros, nos hacen disfrutar la libertad, nos apasiona y son las cosas que más nos llenan la vida y los sueños, porque son las que nos liberan de la esclavitud de esta sociedad.

    Yo creo que no importa la edad, importa cuánto te dejas perder tu libertad!!! Acomodar los tiempos, a las circunstancias, a los espacios a las nuevas personas que entran en tu vida, todo ello genera un poco más de trabajo pero hay que apretar el acelerador mira que la vida va y va y va.. sin regreso.

    Dos abrazos, mil cariños y muchos ánimos..

    Le gusta a 2 personas

  2. La vida es una continua elección. Lamentablemente a todos nos duele un poco el pasado y el futuro. Porque habría que vivir mil vidas para hacerlo todo. Creo que lo mejor es sentirse libre, antes y ahora. Más allá de las limitaciones, saber que siempre estamos eligiendo -con el criterio que sea y desde el lugar que podamos-. Eso, no nos lo quita nadie.

    Le gusta a 1 persona

  3. Hasta que no pasas por un trance como este, no te das cuenta. Y la suerte que tenemos es de que tú nos hagas reflexionar. Luego ya, cada uno despierta cuando quiere, si quiere, como quiere… Pero efectivamente.
    No hjay más límite que el que nos pongamos nosotros.
    Siempre hay más ahí fuera.
    Siempre.
    Gracias.

    Besos!

    Le gusta a 1 persona

  4. Reblogueó esto en Y. J. Rivasy comentado:
    Decimos que la vida se basa en experiencias, pero hablamos de la vida como si fuera un sujeto o peor aun, un objeto, que describimos como si fuera un producto y terminamos por confundir el sustantivo con el verbo. Vivir es un acto que se debe realizar todos los días y a cada segundo, no tenemos que esperar que pase nada, simplemente debemos hacer las cosas, no importa cuán insignificante sean, no importa cuán absurdas parezcan.

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario