cruce de caminos

Cada decisión que tomamos nos obliga a emprender un nuevo camino. Elegimos entre varias opciones y nos decantamos por una u otra en función de las necesidades o caprichos del momento. Sabemos, pues, el inicio de cada camino. Lo que no podemos saber, ni siquiera imaginar, es cómo va a ser ese camino una vez que empecemos a recorrerlo. Ni siquiera sabemos cuál es el final porque probablemente no lo tenga y no sea sino otra intersección más, otro cruce con varias posibilidades para elegir. Y así sucesivamente.

Lamentablemente (o no) la vida no es un camino que va desde aquí hasta allí. Más bien son muchos pequeños caminos que van desde una decisión hasta la siguiente. Cada vez que descartamos algunas opciones para elegir una concreta, estamos dando un vuelco radical a nuestro mapa de vida. Tan importante como nuestra elección son nuestros descartes. Dónde nos habría llevado cada uno de esos descartes, es algo que sólo sabremos en otras vidas, en otros mundos, en otras realidades.

Y mientras tanto vamos viviendo casi sin querer, siguiendo una curiosa inercia vital que nos empuja a dar un paso más sin ser muy conscientes de lo que significa darlo. Sin pedir perdón y sin pedir permiso, sin molestar a nadie pero sin arriesgar, porque arriesgando estoy obligado a pensar. Y lo malo de pensar es que cansa y a veces duele, por eso nos gusta desconectar embobándonos con esos estúpidos programas de televisión, por lo general frívolos y  facilones en los que el nivel medio de contenidos es absurdamente bajo y suponen un insulto para la inteligencia de sus propios espectadores.

Sí, eso es lo que pasa, que no queremos pensar, porque si pensamos tal vez lleguemos a la conclusión de que nuestra vida no nos gusta y eso sería una catástrofe porque no tenemos ni tiempo, ni dinero, ni energía para cambiarla, así que nos tenemos que conformar con dejar las cosas tal y como están no vaya a ser peor el remedio que la enfermedad.

Cada camino que elegimos proviene de una decisión tomada casi sin pensar. No nos extrañemos luego de que el camino es un poco feo o difícil de recorrer. Es así como lo hemos querido. Nadie decide por nosotros. Tomémonos el tiempo suficiente y elijamos con calma.

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Seguramente caminaremos por caminos dignos de ser caminados.

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12 comentarios en “cruce de caminos

  1. Muy verdadero, y muy bien escrito… y no..no nos conformemos. Llenémonos de energía, encontremos el tiempo y el dinero…no lo necesitamos para sentir felicidad, mientras tengamos salud, ilusión y intentemos tener siempre un mejor corazón…
    Haces unas fotos preciosas 🙂
    Un abrazo
    Bàrbara

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  2. Hola Aceituno desearte que tengas un buen día, felicitarte por tus escritos, sin duda nos haces reflexionar .. y bastante .. y eso es bueno. esta vez me quedo con este pensamiento «Pasa, que no queremos pensar, porque si pensamos tal vez lleguemos a la conclusión de que nuestra vida no nos gusta y eso sería una catástrofe porque no tenemos ni tiempo, ni dinero, ni energía para cambiarla» uuuhhhfff doloroso…. mejor dicho sin comentarios!! solo reforzar que efectivamente el recorrido la forma y la deforma de nuestro camino o nuestros pequeños caminos la elegimos cada uno, por ello comparto tu frase «Tomémonos el tiempo suficiente y elijamos con calma».
    Un abrazote y de pasada pedirte que me saludes a mi queridísima amiga «Carolina»

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    1. Gracias Marité. Por supuesto que Carolina te devuelve los saludos multiplicados por mil. Dice que se acuerda mucho de ti y que muchas veces te echa de menos. Yo, por mi parte, decirte que me encanta que te pases por aquí de vez en cuando y leas estas pequeñas idas de olla que escribo. Me encanta que te haga pensar. Coméntalo por ahí porque la idea es hacer pensar a cuanta más gente mejor. Un beso enorme de Carolina y mío….

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  3. Decisiones… las tomamos permanentemente. Buenas, malas, pero las tomamos. Sería genial tomar siempre las correctas pero… nos sobreviene la finita humanidad y ¡zas!. Aprendemos con los años, a medida que envejecemos por fuera y nos renovamos por dentro. Es casi imposible no errar algunos pasos.. aunque, el que nada hace no corre riesgos ni se equivoca. Hay que ser prudentes, sí. Hay que ser sensatos, obvio. Hay que tener sentido común, por supuesto. Y junto a todo ello debemos levantar el estandarte de nuestros sueños e ilusiones… porque más allá de todo acierto y de todo error nunca hay que dejar de intentar alcanzar aquello que anhelamos.

    Quizás me fui un poquito de tema, pero se me salió el alma de paseo, jaja. Saludos, Tuno 🙂

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      1. ¡Buen día!
        Es que el día estaba agradable para dar un paseo 😛
        Por Acei-Tuno… una forma amistosa de llamarte, pero si no te agrada no lo repetiré ¿vale?
        Que tengas un lindo miércoles. Abrazo.

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  4. No sabes cómo me gusta y cómo comparto tu escrito. Lo suscribo de la primera a la última letra.
    Todo apunta a que cada vez miramos más hacia fuera que hacia dentro, y el futuro, el bueno, está en nuestro interior. Pero eso es meternos en el más negro y áspero de los túneles. Lo de fuera es más fácil.
    Gracias por tu escrito.
    Un abrazo.

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